1. Mantén un buen historial crediticio
Asegúrate de que tu historial crediticio sea bueno, ya que te facilitará el acceso a créditos hipotecarios o planes de financiamiento.
Si todavía no tienes una cuenta bancaria, es momento de abrir una y mantenerla al corriente de pagos; procura pagar por encima del mínimo y debajo del límite de financiamiento.
Evita en lo máximo de lo posible las compras a meses, también es recomendable no pagar con tarjeta de crédito productos de la canasta básica.
2. Empieza a ahorrar
¿Estás buscando en qué invertir? Entonces debes considerar que toda inversión necesita de un pago inicial o enganche, por lo que te recomendamos tener cuidado con los temibles gastos hormiga.
Los lotes residenciales son herramientas de inversión que generan grandes rendimientos, pero que necesitan del pago de un enganche. Los expertos recomiendan que cuentes con un ahorro del 10 % del valor total del bien inmueble en el que estás interesado.